Tuesday 13 May 2014

Deceptive angel

Hasta el más benévolo de los ángeles
oculta una daga en su vientre
incluso el más compasivo
ha visto a la crueldad desde dentro



Meddling glass

The glass between us
won't let you see
the flames within me
how they are rising
to warm you through the night
and enlighten your days

Now I got them
just for myself
they are burning my bones
reaching my soul
I know that this time
it won't hold the heat
it soon will turn
into a fading trace

Blazing memories
of love and joy
woke up sharper than ever
they are cutting my guts
even the solid air
they could cut
memories of  touching
the purest lips,the purest eyes, the purest soul
now my skin is tearing apart
facing the idea of losing you

I finally decided
to break the glass
So you could
smell the fire at last

But I hit so hard
all is covered in blood
the fire burned so much
the air is just ash
and I'm drowning on it
choking with it

Your voice is swallowing
the rest of me
Your voice is swallowing
the rest of me










Siempre fuiste
el más dotado destructor
de todo lo bello

Un talento sobrenatural
para ensalzar la derrota
a obra de arte

Te quedarán las ruinas
hermosos fragmentos
de un pasado sublime
lacerante


Monday 12 May 2014

De interior

Tu voz
tu voz no se encuentra
se quedó en la cuneta
el infanticidio de la pubertad
tu voz se perdió
junto a la mirada angelical
y la inocencia genital

Tu voz no se oye
y eso te da más miedo
que el mercado laboral
la navidad o los curas
en libertad

Tus oídos
tus oídos enfermos han caído
escuchan de todo
menos la verdad
tu voz grita
pero de nada sirve
solo un eco distante
ve la luz

Agridulce

Dulce su estambre
dulces sus anteras
dulce su pistilo
dulces sus pétalos
un dulzor este
que nunca indigesta

Amargo solo es el perfume
que exuda cuando dice
adios

Trampolín

Y la conclusión es
que aquí no hemos venido a contemplar
sino a ser, gozar y padecer
nos reímos del traspiés

Nos encantan las entradas
más aquellas que nunca acaban
ya quemamos el programa
solo quedó el principio y el fín
pero hoy ya es mañana
y no tenemos más que este trampolín

Sunday 11 May 2014

Boeing 737-800

Vuelo y vuelo
tiemblo y tiemblo
tantas cosas que no entiendo

Atenta azafata
ponme droga en el cubata
quiero oir a los ángeles
entonar coros celestes
abrazar a mi elefante
como si fuera mi último amante

Y si me duermo
alguna oferta perderé
un coche, un bocata
o el mejor abrigo de piel

Y si despierto
cosas pequeñitas veré
gente, perros y algún chalé

Desde mi ventana puedo ver
la espesa estela de miedo
sintiéndose confusa
entre la luz y el color
con las pezuñas al acecho
de las nubes y el sol





Ser

Buscas y no encuentras
ni oficio ni beneficio
preguntas y no escuchas
direcciones o siquiera alusiones

Vagas sin saber qué hacer 
de mayor siempre quisiste ser pequeño
y ahora todo te viene grande 
sigues sin saber que ser
solo querías ser tú mismo
el mayor experto en la materia
pero dicen las buenas lenguas
que eso ya no da de comer

Dices que quieres ser 
el vampiro de todos sus miedos
el verdugo de todos sus fantasmas
el enterrador de todos sus 'no puedo'
olvidar la piedad
prender su maldad
zanjar su final

Juras que quieres hacer de ella
tu devota profesión
tu única vocación
la última razón
conjurar la virtud
revelar el amor
firmar la paz

Sabes que eso no puede ser
te lo dicen por cada rincón
no conoces nada del querer
eres uno y uno seguirás

O puede que el destino
por fín te sea fiel
puede que todo el mundo
no vea más allá de sus pies
puede ser















Querer

No quiero ser un number 1
ni ver mi cara en papel celofán
solo quiero ser campeón en alegría
premio nobel de la risa

No te quiero la reina del baile
ni la salvadora de la humanidad
solo quiero ver a través de tu piel
y oir tus gritos de pura libertad

More

Everyone's waiting
for something else
everybody is dying
for something more
but not me
oh man not me

Don't tell us
that this is it
we can get enough
give us at least the sea
but I do
oh yes I do

She's never
as good as I want
he's never
the way I wish
but you are
oh sweet daydream
you are

De cerebro a lengua

Palabras en cuarentena
hacen acrobacias
dentro de su batisfera
se lanzan a las grietas
desde ellas gritan
verdades brutales
valientes ellas

Pero se pierden
entre sus dos neuronas
y sus tres amantes
se enzarzan entre
significados y significantes
nadie las oye
nada pueden hacer
están condenadas
a una lucha eterna
siempre en cuarentena

Out of phase

Late tears
getting frozen 
through warm cheeks
just the thirsty soil
just the dry sea
will understand

Late tears
sharpened with regret
by the knife of fear
just the silent wind
just the harmless fire
will take care

I wonder when I will stop
searching for your name
in every sad song
trying to find your face
in every tv drama
I wonder when I will rise to the surface
of this late tears

Isla

Incluso desde aquí te puedes cegar con sus colores, intoxicar con su fragancia y levitar con las melodías que exhudan todos sus recovecos. Está lejos, y parece haber sido creada por un arquitecto mucho más lúcido que el nuestro, lo que aquí es normal allí es límpida belleza; es como si nunca hubiera sufrido una tormenta, es como si hubiera brotado ayer.
Es una isla exótica, la más resplandeciente que nuestros sedientos ojos de naúfrago hallan presenciado jamás.
Solo espero que, tarde o temprano, con más o menos sudor y lágrimas, una vez el miedo a ser colonizada se disipe, nos deje impregnar nuestras huellas sobre su arena y se alíe con el tiempo hasta dejar que la luz del amanecer desvele nuestra primera piel.

In reverse

I'll smell the flowers
when I arrive to the city
I'll enjoy the summer
with the first autumn breezes 
I'll learn the game
when my bones won't let me play
I'll bury the hatchet
when the war starts
I'll feel the passion 
with the first hints of your absence
I'll find you
when the search comes to an end

Metafotomorfosis

La historia que me dispongo a relatar es la transcripción de lo que un conocido me contó un día,
a quien a su vez le fue contada dicha historia por alguien a quien un desconocido campesino le
reveló, en virtud de testigo, gran parte de lo que aquí acontece. Yo, con el fin de entender estos
extraños sucesos que me fueron confiados, los expongo aquí, reconstruidos y novelados, de la
forma más clara posible.
La luz del sol atravesaba cada minúsculo espacio existente entre ramas y hojas, creando una hipnótica coreografía de luces y sombras sobre la húmeda superficie del bosque. El sonido de grillos y aves se reverberaba en el espacio; una atmósfera espesa difícil de describir, ligeramente irreal, flotaba allí.
Entonces llegó él, sudoroso y jadeante, tambaleándose levemente y sujetando un ajado jersey
manchado de sangre. Parecía un condenado recién fugado, o tal vez un fugado recién condenado;
en cualquier caso, su llegada a aquel lugar no fue casual. Semienterradas huellas del destino le
condujeron hasta él.
Se abrió paso hasta una especie de lago que había a pocos metros de donde se encontraba y lanzó
el jersey sobre sus aguas; poco después cayó rendido sobre el frondoso verde, al cobijo de las
sombras. Allí pasó las siguientes dieciocho horas, con la esperanza de que el sueño le absolviera.
Al despertar, con los sentidos ya desentumecidos, le asaltó la conciencia más impía, y el terror
por la supervivencia se apoderó de él.
Empezó a buscar cobijo. Rastreó todos los alrededores, primero en busca de cuevas (era preferible
tener el agujero ya hecho, pensó) y después en busca de cualquier cosa; hizo hoyos, trepó árboles,
incluso asaltó nidos, pero ningún sitio parecía querer acoger su voluminosa figura.
Exasperado, llegó a la conclusión de que la única posibilidad que tenía era la de construir algo con sus
propias manos, así que, haciendo uso de los elementos de los que disponía, se lanzó a armar una
pequeña cabaña. Tras varias horas de búsqueda y encaje de materiales, un amasijo de cañas, ramas y hojarascas brotó en medio del hasta entonces armónico hábitat;
un vulnerable triangulo rústico al que ahora llamaría hogar y que le protegería al menos hasta la
próxima tormenta.
Conformado ya el habitáculo que, al menos físicamente, le resguardara, solo le faltaba algo que le
protegiese de él mismo y de las criaturas que merodeaban por sus oscuros meandros, una cabaña
interna iluminada por la luz del amor eternamente inasible.

A pocos metros de la cabaña se encontraba el gran lago, silencioso e intimidante, que parecía el
sereno guardián de todo aquello. Allí se habituó a ir a lavarse, a nadar, a meditar…Toda una gama
de actividades cuyo principal objetivo no era otro que el de tratar de limpiar las manchas que se le habían adherido al alma, las cuales no le dejaban dormir, ni comer ni apenas respirar.
Hacía tiempo que comenzó su viaje a los parajes más oscuros de la psique humana, hacía tiempo
que se había resignado a no encontrar la paz, pero ahora era distinto, había traspasado todas esas
oscuridades para adentrarse en la nada mas absoluta, una nada que le estaba robando todo.
Había matado a un hombre, a su propio hermano, la única persona que había traspasado sus
impenetrables membranas y le había llegado a conocer realmente. Un lamentable accidente, cierto, pero el azar no podía indultarle ni extirparle la culpabilidad. Cada vez que despertaba rezaba porque
todo fuera un sueño más de crímenes sin sentido, llegaba incluso a creérselo durante un rato, hasta
que se acercaba al lago, y, una vez dentro, este le devolvía su más fiel y profundo reflejo. El lago
no le engañaba, era su único confidente, su depósito particular de intimidades y secretos. En él
pasaba días enteros, en una mística comunicación de códigos intransferibles, escuchando la ancestral sabiduría que este le transmitía mediante sinuosos movimientos y minimalistas sonidos.

Una ignota sensibilidad nació en su interior, una especie de percepción animal que le permitió
adaptarse al entorno y beneficiarse de los conocimientos que la naturaleza le iba proporcionando.
Se sucedieron días de calma y meditación. Un estado de bienestar desconocido le imbuyó; no
podía saber si era algo bueno o malo, pues no tenía referentes previos, era algo nuevo para él, y
lo nuevo siempre le provocaba cierto terror.
Así pasó una semana, una semana que sintió como si fueran unas horas.
Una noche, estando ya acostado, próximo al sueño, sintió un ligero temblor en la tierra que le hizo
levantarse abruptamente. Salió de su cabaña, avanzó unos pasos e hizo uno rápido reconocimiento
de la zona. Todo estaba en calma. Se dio la vuelta para volver a su refugio, pero en ese momento
un escalofrió le sobresaltó. Se paró, y, atónito, pudo ver como una fantasmagórica masa de luz
se dirigía veloz y estrepitosamente hacía él. El inefable fenómeno se estableció sobre su cabeza,
iluminándole hasta la difuminación.
No se sabe si obligado, convencido o simplemente guiado, el hombre empezó una procesión con
la luz como dios que le condujo hasta el lago. Allí, tenuemente se pudo ver como ambos desaparecían en aquellas aguas indolentes.
Nada más se supo de él. Se especuló mucho, incluso se oyeron historias de gente que aseguraba
haber visto a un enorme y extrañísimo pez salir del agua y tumbarse en la orilla del lago. En poco
tiempo, y como era de esperar, su historia se convirtió en la leyenda del lago de Virisa.
Transformado o simplemente ahogado, lo que si se puede asegurar es que su espíritu quedó
impregnado en cada rincón de aquel lugar.


Más historias del mar

Llegaron a la playa sobre el mediodía. Se acomodaron como pudieron entre los escuetos huecos en los que las rocas no eran muy afiladas.
Él se quedó estático, tumbado boca arriba mientras el sol abrasaba su fornida figura; ella se aventuró en las agitadas aguas del primitivo paisaje.
Mientras exploraba las profundidades más superficiales, un cuerpo extrañó chocó contra ella.
 Se trataba de un hombre, un peculiar ser cuya indumentaria consistía únicamente en un gorro con símbolos árabes estampados que se aferraba a su cabeza gracias  a una fina tela atada a su cuello.

Se miraron inquietos, incómodos por la tonta necesidad de decir algo.
Pero no dijeron nada. Siguieron mirándose, cada vez más sorprendidos ante la avalancha de sensaciones que el simple acto de mirarse les transmitía, libres ya del rubor que provocan los encuentros con desconocidos, atentos solo a los rasgos faciales de cada uno: ella a su afilado y velludo rostro, a sus dulces ojos oscuros que imploraban ternura, a su ambiciosa nariz; él a su tez rosada, a sus pómulos carnosos y a sus labios resplandecientes.
El misterioso nadador cogió la mano de la  joven  y esta accedió a seguirle. Ambos se sumergieron y bucearon por debajo de una gran roca.
 Al salir a la superficie, los ojos de la chica temblaban de emoción. Ante ella tenía un amplio salón compuesto por viejos muebles y  múltiples telas extendidas por el suelo que hacía de antesala a diferentes habitáculos.
Pero lo que subyugó a la joven fueron los diferentes objetos que había esparcidos por toda la sala; se trataban de muchos de los juguetes, juegos y artefactos con los que ella había crecido y que de una forma u otra habían ido desapareciendo a lo largo de su infancia. Peluches ajados, casas de muñecas cubiertas de diversas criaturas marinas adheridas a sus paredes, un pequeño carrusel de colores destintados y varios otros elementos difíciles de reconocer.
No quiso pedirle explicaciones, no intentó desvelar todo aquel mágico misterio, simplemente se acercó a el y cogió su mano.Nunca más se supo de ellos.



 



Thursday 8 May 2014

Inadaptado vocacional

 Hiciste apología del amor
 Y nadie te entendió
 Acopio de fuerzas
 Y de nada sirvió
 Te vestiste de persona
 Y a todos confundiste
 Levantaste la cortina de humo
 Y el pueblo no lo vio
 Sangraste las tripas sin filtro
 Y el rey ni aplaudió
 Miraste a la muerte a los ojos
 Y esta se asustó

 Qué más he de hacer
 Gritaste a los señores de la razón
 Qué más
 Para ser uno de ellos
 Para volver a sentir
 El amargo dulzor
 Del certero vivir

Hoy llamas, mañana luz

 Mi generación perdida
 tu sonrisa caída
 nuestro miedo enamorado
 quedarse en la nada
 o cruzar el mar a nado
 volar sin alas
de la mano de sueños
 en llamas

 Quedará el jovial refugio
 del ahora
 el tú, el yo, el nosotros
 el río y la hiedra
 las ilusiones salvajes
 de cada amanecer